Jolín, menos mal que se ha ido el tontarra este y me ha dejado el ordenador conectado. Se ve que últimamente está muy celoso conmigo porque ve que se me valora más. La verdad es que el infeliz no pone más que sandeces de poco infundio o injundio, o las dos coss. La verdad es que suelo ser muy atinado en mis comentarios porque los tengo de todos los tipos, la cultura populá de la barra del bar me da una visión superficial y profunda de las cosas que no dejan a nadie impertérrito y me facilita traerme a la gente a mi territorio. Vamos, que al final sigo hablando y me pagan la conviá.
Y ya. Sin más prolegómenos y menos prólogos dificultosos y prolíficos o profilácticos vamos al pan pan. La gente quiere claridad y eso yo si lo tengo. La gente quiere que hable sin pelos en la lengua y como yo no me suelo morder la lengua ni el sobaco, mis opiniones son directas. Mi primo no. Entre el miedo que tiene a quedar mal con los de arriba o a decir algo que pueda ser tachado de impertinencia y le pongan penitencia, está siempre utilizando subterfugios de la intelegencia en detrimento de la verdad y la autenticidad y la sinceridad mezclada con la honestidad.
Lo politicamente correcto. Ese es el quid de la cuestión, el quid, quae, quod, que decían los romanos cuando se iban de parranda, o algo así he oido.
Cara de romano se me ha quedao escuchando otra vez al Rubalcaba de la educación. Parece que está de moda y que me está leyendo a mi en el blog de mi primo, se ve que como digo verdades como puño y otras verdades de perogrullo, está tomando nota. A mi no me importa que me lea, lo que me da coraje que aqui cada uno que entra quiere cambiá la educación y llevamos cambiándola toda la vida sin cambiar ná.
Mamarrachos de despacho, diseñadores de normas que no conocen la realidad como la conozco yo. Fíjate que atropello comete un político con lo politicamente correcto. Primero riegan los oidos con palabreria fina y mensajes delicados: la educaión es lo más importante y es una inversión para el futuro. Nuestros jóvenes de ahora son el futuro y bla, bla. Después te mandan un mensaje subliminar: el acceso a la educación tiene que ser como el MIR. Toma ya. El MIR, que está a punto de fenecer. Salen los trastores y los detractores y entre globo sonda y sondas sin globo, la casa sin barrer.
Llevamos logse y loes y leas y conceptos nuevos cada curso pá terminar en lo politicamente correcto pá descubrir después que hemos metío la pata y que pá esto mejor lo anterior.
Un ejemplo: ponen en los colegios especialidades, luego se dan cuenta que falta tiempo pá las materias de toda la vida, quitan especialidades, nuevo sistema, cambia, recambia, estructura, desestructura y la casa sin barré.
Otro ejemplo. Que bonica suena la palabra INTEGRACIÓN. Así, en mayúscula. Que bonico me queda el discurso de que todos somos IGUALES. Así,en mayúscula. Y como hablamos de INTEGRACIÓN, así en mayúscula, nadie tiene nada que decir porque no estamos en lo politicamente correcto. Años después escuchas y lees a chavales que han sufrido una integración desintegrada porque lo que decía en letras mayúsculas también tenía su letra pequeña.
Que sí. Que sé lo que estás pensando. Lo mismo que me dice mi primo cuando llegamos a estos temas: que soy un retrógrado, que soy un aquienlosado ¿o anquilosado? No sé.Algo mu fino me dice que nunca me aprendo bien.
Lo que si te digo es que sobran decoradores y faltan obreros. Que hacer la ley con cuatro envoltorios semipedagógidos, o pseudos, nunca los he distinguio mu bien, es facilísimo. Pero cuando luego vas a la realidad y una ley integradora ha vuelto loca a la maestra, ha distorsionao a toda la clase y hasta el presuntamente beneficiado dice que de iguales ná de ná, entonces apaga y canta con los payasos "y si esta historia os parece corta volveremos volveremos a empezá"
A mi es que los payasos de la tele me dejaron muy marcao. Yo no escuchaba cantautores de esos que escucha mi primo y libertad pá arriba y libertad pá bajo y un falo llamado libertad. Lo mío era y sigue siendo llegar al bar y preguntarle a la gente ¿Cómo están ustedes? Y entre bromas y fútbol y un valdepeñitas ir desgranando la realidad. Que no es cruda. Lo que pasa es que la realidad hay que conocerla como la conozco yo, hablando con la gente de la calle, que esa sí que sabe. Y no teóricos de todo esto que solo dicen pamplinas.
La leche. Las dos y diez y yo aquí. Como me coja mi primo escribiendo estas cosas no me deja más entrar en su casa. Hoy me ha dejao quedarme porque he bebio un poco más y como me hagan soplá me entero.
Eso sí. Espero que no salga ningún político correcto a poner en duda mi sinceridad, mi verdad ni mi honestidad. Que mi libertad termina donde empieza la tuya y no debemos confundir libertad con libertinaje.
Y ya no pongo más frases hechas que aluego mi primo se burla de mi. Será joio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario