sábado, 9 de abril de 2011

PACO IBÁÑEZ ¿CANCIÓN PROTESTA?



El primer disco de Paco Ibáñez tiene canciones de Lorca y Góngora como El lagarto está llorando o Y riase la gente. Buenísimas todas.
Publicó antes de su disco estrella EN EL OLIMPIA, dos discos con canciones como Coplas por la muerte de su padre, de Jorge Manrique o Don Dinero, de Quevedo. O este Romance Satírico del genial autor.

Y a partir del 77 empieza desde mi punto de vista lo mejor de su obra. El disco dedicado a Neruda es impresionante. Además nos dio la oportunidad de conocer a CUARTETO CEDRÓN y RAÚL GONZÁLEZ TUÑÓN.
Su disco A FLOR DE TIEMPO fue continuar con un papel que si ha desarrollado: PACO IBÁÑEZ JUGLAR DE NUESTROS DÍAS, era el titular de una revista que aún tengo por ahí.
De ese disco me gusta muchísimo un tema casi desconocido: ROMANCE DEL PASTOR DESESPERADO

Tradujo con Pierre Pascal a Brassens y fue realmente asombroso la poesía de esas traducciones. Buenisimas todas y me encantaba poner la cara B que empezaba con POR UNA MUÑECA ME HICE CHIQUITIN.
Publicó POR UNA CANCIÓN, bello disco con unos arreglos instrumentales increíbles. Volverán las oscuras golondrinas o Tus ojos me recuerdan son dos temas casi mágicos.
Bello de principio a fin es OROITZEN, un disco cantando en vasco que suena profundo.
Igual de profundo y hermoso es el disco a Goytisolo. Cada vez que lo escuchas te gusta más, especialmente los temas más difíciles.

Un poco desapercibido el disco con SOTO por aquello de mezclar dos estilos que a priori parecen diferentes. Pero no lo son tanto. Paco canta muy bien las canciones hispanoamericanas. Pertenece al disco FUE AYER.

TESIS HIPOTÉTICA DE LA IRONÍA Y LA ACIDEZ Y DE RECUPERAR EL RITMO AUNQUE SEA DE SEVILLANA.

Cuando el amargor de la realidad circundante provoca en tu interior un estado bilioso debes parar y en un rápido análisis clínico decirte: chaval, calma.

Que tú mucho blablabla pero cuando una gitanilla de Albolote te ilumina el alma lo dejas todo. Mamarracho, que eres un mamarracho. Me miraste, mi miraste y toda mi noche brilló de luceros. Me embrujaste.

¿Qué me distes?

Gracias por tan buena tarde.