sábado, 23 de agosto de 2008

CANTAUTORES. 1. GEORGES BRASSENS

No suelo levantar mucho mi sombrero por nadie pero Brassens supone para mí mucho más que música. Brassens expresa una forma de ser, una actitud ante la vida, que va más allá de las canciones y raya en la filosofía. Conocí a Brassens en una clase de francés. La profesora llevó el volumen 3 y en ese momento pensé, tenía 14 años, la de talentos que había en este mundo por descubrir. No le perdí la pista y recuerdo la emoción cuando tuve en mi poder el volumen 2 "Les amoureux des banc public" y como me parendí las canciones de escucharlas una y otra vez. La embajada francesa me envió en el año 79 toda su discografía. Yo mandé unas cintas y ellos ¡¡Me las grabaron!! Conseguí todas las letras y traduje sus canciones. De las canciones primeras, más simples, recuerdo casi todas. El enterrador y El testamento son maravillosas. Pero las que hizo después no lo he visto hacer a más cantautores: mejorar continuamente. El disco de Fernande es una obra de arte. Morir por las ideas, 95 %, Estancia a un ladrón y, TODAS, son joyas y pequeños tesoros de la palabra escrita. Cuando viajo por Francia o por otros países europeos sigo buscando su obra ¿Para qué? Si ya la tengo en todos los formatos. Pues creo que por admiración mais... je n´ai avais jamais oté mon chapeau... Gracias porque tu socarronería, tu humor y tu ironía amarga me facilitan el contacto con la cruda realidad. Y descubrir que haga lo que haga siempre lleva apóstrofe, redescubrir diariamente la mala reputación en mis huesos o ser la mala hierba, me