domingo, 18 de septiembre de 2011

VUELVO EN CINCO MINUTOS

Que no. Que no me he muerto. Lo siento. No he cerrado por autodefunción. Simplemente estamos cerrados por reforma, ni siquiera por derribo, que canta el Sabina.
Las 800 entradas que empezaron como un juego ya no caben en el salón y le estamos haciendo habitaciones más amplias.
Es lo que se llama PÁGINA PRINCIPAL. Y en cinco o seis lo vas a tener todo más a mano, más o menos.
¡Qué bien suenas, Joaquinito!

ROMPER ESQUEMAS

Ahora que nos comemos los últimos espetos de sardina y el carbón de la barbacoa ya huele a ceniza es un buen momento para ser positivos y plantearnos que el otoño tiene su encanto. Hay cierta obsesión por la felicidad continua.
Deseamos vivir tan intensamente qie a veces perdemos el verbo por el camino y nos quedamos en el adverbio.
Tiempos que exprimen la felicidad para obtener la nada. A modo de ejmplo el oxy shot o chupitos de alcohol, la urgencia por llegar al final sin haber hecho el camino.
Desorientados, confundimos el tiempo y la rutina con el tiempo y la aceleración.
Yo no soy ejemplo de nada pero creo interesante romper esquemas. Hace 30 años muchos me daban el pésame porque la mili la iba a pasar en SAN CLEMENTE DE SASEBÁS cuidando mulos.
Allí que me fui intentando pasarlo bien y con un grupo de amigos /amigos (la mili era mu de hombres) pasé un año de fiesta en fiesta.

De aquello hace algunos años ya, pero ese pienso que tiene que ser el espíritu.
¿Se quemaron las chuletas? Pues a comer pan con chorizo.