En el inventario particular que estoy haciendo para tener mis vinilos al día, descubro que uno de mis discos preferidos es TE DOY UNA CANCIÓN, de Silvio Rodríguez. Reconozco un disco que me gusta si me sé todas sus canciones de memoria. Y este disco me lo sé. Me recuerdo en el instituto cantándole a mi compañero de mesa "el hombre se hizo siempre de todo material" y el pobre compañero diciendo aquella frase que luego popularizó Almodovar: "que he hecho yo para merecer esto" 
Recuerdo también por aquel entonces mi amistad con un locutor de radio. Me gustaba ir por la emisora y algunas veces yo le prestaba discos y otras él me lo regalaba. Un día me encontré con su hermano en el ascensor, con quién compartía mi gusto por Silvio y me dijo:
- Nunca más volveré a escuchar a Silvio. Cuba es una dictadura y cualquier tirano convierta a un cantante en alguien que le hace himnos.Yo me encogí de hombros pero nunca me ha gustado simplificar. Silvio tiene alguna canción política pero muchas que no lo son, que son preciosas canciones de amor o sobre la vida. Igual que reconozco esto, digo también que tiene por ahí canciones malísimas y discos que prácticamente desconozco.
El segundo disco que se publicó de Silvio me gustó más todavía en su momento porque yo era de verso y guitarra. Y Silvio muy de frases para que te gusten. La familia, la propiedad privada y el amor tocaba la fibra sensible de un quinceañero. Del Ojalá que te voy a contar, era un himno más que una canción. El Resumen de Noticias y Debo partirme en dos algo único y el Óleo de Mujer con sombrero, pieza única de museo.
Y el tercero que se publicó en España, también me lo sé de memoria. ¿Qué hago ahora? ¿Dónde pongo lo hallado? Hoy no quiero estar lejos de la casa y el árbol.
Una maravilla que aparece con solo pinchar aquí.
