martes, 23 de marzo de 2010

VIVENCIAS Y OCURRENCIAS

Cuanto más me aprietan, más se me dispara la mente. Cualquier día me acusan de homicidio, espero que involuntario.
Hoy he estado con una persona tan aguda que hacía análisis cítrico. Todo lo que yo decía me lo analizaba inmediatamente con zumo de limón.
Los ajetreos del amor y el desamor me vienen y me van. Siempre dudo si el amor es una proposición eterna o una preposición temporal. Se comienza una relación pensando "estamos hechos el uno para el otro". Pronto pasamos a estar el uno sobre el otro y muchas veces terminamos el uno contra el otro.
No hay ninguna preposición indecente. El adjetivo ya es otra cosa.
Me pongo música para relajarme y calmar mi alma y armar mi calma y le primera canción que sale me pone triste. Es bueno sentirse triste. Al menos mejor que alegre con un tropo.
En fin. Hoy no tengo cura. Espero que mañana tampoco.