lunes, 5 de mayo de 2008

Parole, parole, ole con ole

La ministra de defensa me tiene bajo... de defensas. Cada vez que viaja y se pone firme me deprimo.
Después, en su casa, se mirará al espejo y se dirá a si misma" Ay, Carme, Carme, que lejos estaba tú de todo esto"
Pero lo peor son palabras que con aire profundo siembra en el aire guerrero: "generosidad" "gallardía""ardor de estómago, digo ardor guerrero" Y es que en el WC del avión, mirándose muy seria ante el espejo, debe decirse para sus adentros "Ay, Carme, Carme, cómo hemos cambiado"
Militares, ese cuerpo añejo que sigue oliendo a instrucción y jamón rancio. Que se nutre de compatriotas de otras patrias y estudiantes que encuentran amparo por no terminar la Eso. Y no acuden a la aventura, ni a la generosidad, son las vocaciones de la edad media ¿o se escribe boca//ciones?¿o tal vez bacaciones? No sé. Ni me importa, porque hay mucho de Calle sin salida en lo que la ministra llama Gen de la eroisidad.
Estupidez, Carme, estupidez. La metamorfosis la escribió Kafka pero la reescribiís todos los días.

Igualdad que igual dá.

La feria de mi pueblo dicen que es la mejón der mundo. Y tiene que sé cierto porque se vive con los cinco sentidos.
Fue el oído lo que me tuve que cuídar el jueves cuando oí por una emisora local a un gachó hablando que le gusta ir a la feria para ver "caballos bonitos" y "mujeres bonitas". Así, en el mismo lote.
Esa falta de tacto me hizo reflexionar que realmente las mujerez de jerez tienen que ponerse al galope en estos tiempos moernos donde se pregona la iguardá pero todo queda en iguar dá.
No quiero meter mis narices mucho más allá para que no salgan chamuscadas y me quede sin olfato pero evidentemente a los hombres de mi pueblo les falta vista, pero especialmente les falta sentido común.
La feria es una fiesta anacrónica que huele a caballo viejo, caballo de la sabana sé que te gusta cantar. La feria es esa fiezta, que fantáztica fantáztica ezta fiezta, del señorio y de la zevillana. Señoritos de postín, que decía Carlos Cano, que acuden a la academia queriendo saca la grasia lo mismito que se saca el carnet de conducí.
Eso sí, el vino no hace milagros pero transforma cuanto toca.

No es que no vuelva

No es que no vuelva
porque me he olvidado
de tu olor a tomillo y a cocina

Podría seguir...
Pero la verdad es que si no vuelvo no es por falta de pensamiento, sólo falta de tiempo. Hablar con uno mismo es importante, hasta por escrito.
Estimado compañero:
Últimamente parece que no tienes tiempo y eso no es bueno. Dedícate un poco a cultivarte que de seguir así no te vas a reconocer de exabruto.
Escriu-me aviat o en este caso escriu-te aviat, te va la vida en ello. Bructo, Más que bructo.