JAVIER KRAHE

"Mi disco se titula así para burlarme de la facilidad con la que se hacen las canciones"
ARTÍCULO DE PRENSA. JAVIER KRAHE PRESENTA SU DISCO TOSER Y CANTAR.

Debe ser cierto lo que dicen acerca de los precarios registros vocales de Javier Krahe, porque cuando lo llamo el auricular me devuelve un hilo de voz rota que habla con pausa y propiedad. Pero Toser y cantar (18 Chulos, 2010) está mucho más allá del virtuosismo vocal. El nuevo trabajo del inefable cantautor madrileño ataca directamente al corazón y a la inteligencia. Once temas llenos de trampas y juegos verbales que nos devuelven a uno de los buques insignia de la contracultura patria.

-¿Por qué dice que le parece fea la etiqueta de cantautor?

-La palabra no me gusta. Si fuera que describe que alguien hace las canciones y las interpreta él mismo, pues cantautores son muchísimos que nadie considera cantautores. Los grupos también son autores de sus letras y las cantan, y nadie los considera cantautores. Por ahí no funciona bien la palabra. Además, ésta surgió en España cuando la canción de autor estaba teñida por la cuestión política, pero Juan Pardo, por ejemplo, también decía que era cantautor porque cantaba aquello de "con un sorbito de champán"; aunque luego también se llamaba cantautor a Serrat o a Raimon. La cuestión es que la palabra se quedó, y si la usan para describirme pues yo no tengo nada que decir, ni tampoco que me gusta.

-Una de las características de su música es el "humor blanco". ¿En qué consiste exactamente?

-Lo llamo blanco porque al humor se le suelen dar colores. Está el negro, que habla de muerte o de desgracia; el marrón, cuando hablas de caca, culo, pedo, pis; el verde, cuando hablas de sexo… El mío es blanco porque no trata de nada de eso. Hablar de los ángulos de un triángulo y que la gente se ría lo encuentro divertido.

-Toser y cantar es el título de su nuevo trabajo, ¿en qué se parecen toser y cantar?

-Las dos cosas se hacen con la garganta. Emitiendo vibraciones. Lo que pasa es que unas vibraciones son armónicas y componen melodías y las otras son abruptas y suponen una tos. Pero se parecen. Y mi disco lo he titulado así para burlarme de la facilidad con la que se hacen canciones y se canta, como cuando se dice que algo es "coser y cantar" (seguramente porque las que cosían cantaban a la vez). Sin embargo, no puedes toser y cantar a la vez. Hay que interrumpir una de las cosas para seguir con la otra.

-Los creadores de 18 Chulos no cumplís ya los cincuenta, sin embargo, los jóvenes les miran como a catedráticos de la contracultura. ¿Cree que alguien está tomando el relevo?

-Siempre hay alguien tomando el relevo, lo que pasa es que yo no lo conozco. Siempre sucede, así que tiene que estar sucediendo. O ya ha sucedido y ya anda alguien por ahí que hace lo que nosotros. Pero yo tampoco soy un seguidor muy grande de la música, yo escucho lo que ponen en la radio y poco más.

-Comienza "¡Ay, democracia!" afirmando que la democracia está como ausente.

-La democracia la hacen los políticos y parece que es muy aceptada por el pueblo, que es donde se supone que reside el origen de todo esto. Pero eso es sólo teoría, no práctica. Porque esta democracia tiene tal cantidad de excepciones que la regla es inexistente. Si IU tiene dos millones de votos y CIU trescientos mil, tienen más representantes Convergencia. Y dicen: ah, no, eso es debido al pacto regional… Pues ésa no es la teoría de la democracia. Y luego aplican cómputos o tal ley que varía siempre los resultados. ¿Tan difícil es sumar? Todo para crear mayorías que siempre benefician a los partidos más conservadores, que son PSOE y PP.

-Entre las temáticas que aborda en Toser y cantar está la mediática. ¿Qué hay de "vil" en la televisión?

-Pues infinidad de programas que son verdaderamente viles. Y sabes a los que me refiero. Las tertulias, los del corazón… Ya me dirás qué tiene eso de interesante. Ahora mismo tengo puesta La 2 y me estoy divirtiendo con la explicación de una teoría física, haciendo humor blanco. Son anécdotas que sí pueden ser interesantes. Me interesa que hablen de esas cosas.

-¿Hay algún antídoto para no perder la identidad entre tanta saturación mediática y comercial?

-Sí, el carácter de cada uno. No dejarte llevar por eso. Me voy a poner un poco pedante: Nietzsche decía que para no formar parte del coro no basta con no querer formar parte del coro, el camino más rápido para no formar parte del coro es no saber formar parte un coro.

-A lo largo de su carrera le han dado palos desde la derecha y desde la izquierda, pero en las redes sociales se le ha apoyado de manera incondicional. ¿Es consciente de su repercusión en estos medios? ¿Sigue Facebook o Twitter?

-No. No sigo ni Facebook ni Twitter. Yo sólo utilizo internet para navegar. No intervengo nunca en nada. Estoy en una página en Facebook, pero desde luego yo no la he hecho. También hay un foro sobre mí, y veces entro a verlo, pero nunca intervengo, porque como no lo he hecho yo no considero que deba hacerlo. Además, tampoco sé cómo se hace. Podría aprender a lo mejor en un ratito, pero no me molesto en averiguarlo. No me apetece dedicar mi tiempo a eso.

Sigo a Javier Krahe desde hace 30 años porque sus comienzos fueron excelentes. Tenía un par de traducciones de Brassens pero especialmente la estructura de sus canciones era una estructura muy fuerte capaz de aguantar el paso de los años. No en vano aún hoy puedes escuchar VALLE DE LÁGRIMAS y cantar las canciones como EL TÍO MARCIAL, SAN CUCUFATO O DON ANDRÉS OCTOGENARIO.
Por no hablar de la genial ¿DÓNDE SE HABRÁ METIDO ESTA MUJER? concisa, exacta y maravillosa canción, porque imaginarse al tontopollas del marido contándole lo de García y de como le ha parado los pies todavía me descojona.

Recuerdo un 8 de julio del 82 recien terminada la carrera de magisterio que un camión se llevó mi moto por delante y dicen algunos que a mi también pero eso no lo recuerdo por el traumatismo. Lo que más gracia le hizo a los que me vieron insconsciente era que no paraba de cantar RAÚL TIENE UN BAÚL AZUL..... canción que me encanta por el tono exitencial y un final tremendo.
Visto lo maravilloso del primer disco APAREJO DE FORTUNA también me pareció alucinante y brillante y... todas las cosas que he dicho antes, como Pitu Piturra y aquellos guantes. Pero a la larga... NO. Todos aquellos arreglos tan floridos tal vez estropeaban las canciones. Tal vez las canciones ya no eran textos escritos para Javier Krahe sino pensando en un público. Es divertido escuchar el disco y aquella bruja de las ciencias ocultas y los caminos del señor y OVNI, pero con el paso del tiempo casi solo me quedo con SR.JUEZ. Y otra gran desconocida, siempre rescatando cosas olvidadas, el TIRALEVITA. Y como simpática EL TOPO, aunque con arreglos muy florales.

Pasan los años y la canción que pasó más desapercibida, la que nunca puso una emisora de radio, la que parecía la tonta, descubre que es la mejor.

Ahora viene el paréntesis de la OTAN y CUERVO INGENUO. Hay una entrevista de Javier donde reconoce que pasó un bache grande porque no lo llamaban para actuar. Estaba oficialmente censurado. Esto me parece una putada. Pero pasado el tiempo, creo que las canciones de KRAHE no tienen que ser flor de un día. Es una humilde opinión.
Después recuerdo en el 83, haciendo la mili en Lérida, que escuchábamos la radio por la noche y nos presentaban la canción NEMBUTAL y los cuatro cachondos mentales nos partíamos de risa con el atracón de mortadela.
Los discos posteriores tengo que reconocer que no los seguí mucho porque me parecían un poco de canción ligera: hechos para actuar. Había cosas buenas o que me gustaban como LAS ANTÍPODAS con su juego de esdrújulas espectaculá.

Su ritmo de buenas canciones lo recuperó con este TOSER Y CONTAR, todas ellas me parecen maduras e interesantes, lo que no puedo decir de discos anteriores. Todo ello desde una perspectiva muy personal.
En lo general entiendo que es el mejor autor de canción de los últimos tiempos y los tres años que está cocinando una canción no es para que un pamplina como yo le critique nada, especialmente porque demuestra una cultura y una forma de ser extraordinarias ambas dos. Y a quien le debemos aquellos años maravillosos de transición, cultura, imaginación y buen hacer. Joé, que hasta el Sabina era auténtico.
Y ADEMÁS TIENE ALMA CHIRIGOTERA.