Se me ha grabado una canción en la cabeza y desconozco los motivos. Dice algo así como en el banquete de honor habrá un lugar muy mío donde no estaré yo. En fin, el lugar nunca ha sido mío. Era Ana María Drack. Tengo el corazón como Alejandro Sanz, partío. Pero eso no me quita ser educado. Soy muy educado. Y un enhorabuena no me falta jamás.
En toda boda o celebración hay un banquete. Hablando de banquetes. También se me ha venido a la cabeza el banquete de tiranos de José Martí que canta tan exquisitamente Pablo Milanés: a un banquete se sientan los tiranos... La concatenación de canciones que me vienen y me van es increíble. Es como un gol en propia puerta, yo no quería.... Mis pies pisan las rocas, mi cabeza sobre nubes va flotando, cantaba Hilario. Merece la pena escucharla.
No he tomado ninguna sustancia psicotrópica pero esta noche alucino. Esta noche vienen a visitarme viejos fantasmas. Esta noche yo no entiendo nada. La vida te depara profundas emociones...
¿Y depara qué es exactamente?
- Este chaval está peor de lo que parece, me dijeron hace 33 años exactamente. Todo se repite.
No hay comentarios:
Publicar un comentario