martes, 8 de octubre de 2013

DEL BLA BLA BLA AL BLA BLA CAR PARA CONVERTIR POR ARTE DE BIRLIBIRLOQUE UNA BUENA IDEA EN UN MAL NEGOCIO AL CONVERTIRSE EN UN NEGOCIO POR FEDER DOCTO JEKILL RESTREGOFF

La economía moscovita de principios del siglo XXI tuvo un marcado carácter descendente. la cosa estaba un poco Putin para muchos y los rusos no tenían para gasolina ni para vodka de calidad. ¿Qué hacer camaradas? El hambre y la sed agudizan el ingenio y las nuevas redes sociales facilitaron que la gente se pusieran de acuerdo para viajar pagando la mitad de lo que pudiera ser el tren o el autobús. De esta forma la gasolina era compartida y el vodka se seguía bebiendo. 
Lo malo es que toda buena idea de organización colectiva pasa por el aprovechamiento individual que corrompe la generosidad de la idea.
Ireneskum tenía que atravesar la gran estepa que va desde Granadeskum a Jerezeskum pero sin pasar por Estepa, ciudad de sevillaneskum conocida por los dulces navideños. Ireneskum concertó un blablacar para que el viaje fuera más barato, pero la historia que te contaré te dejará claro que el ser humano envilece cuanto toca, que la mezquindad es paralela a la forma de ser de muchos hombres, que no hay puertas al mar en cuanto a la codicia humana se refiere. Que los miserables campean a sus anchas poniendo en peligro la vida de buenas personas.
Un tipo sin escrúpulo se hace el viaje semanal de Lebrijaneskum a Granadeskum llenando el coche con personas mientras que su mujer viaja en tren. Hasta aquí todo canelleskum. Pero en lugar de ir por los pueblos cercanos de Campilleskum y Antequereskum, recorre un camino dos horas más largo atravesando los Urales de la sierra de Sevillaneskum. A todo esto viaja con su hija de dos años mientras su mujer va en tren porque viaja gratis desconociéndose tan extraño privilegio de ser hija de papá, trabajador de tren. A la niña de dos años Ireneskum o Tanianeskum le limpia la babita o le da el yogurcito. Cinco horas de viajes de lo más entretenido.
Y esto una semana y otra semana. Lo que era un intercambio de favores, hoy por ti y mañana por mi, se convierte en unos ingresos extras.

Para celebrar tanta dicha el conductor recoge una piedra de hachís y en plena recorrido se prepara un canuto para hacer la o, pero como va conduciendo apoya el volante en las piernas o en otro miembro desconocido.
Cual no será el afán recaudatorio que al llegar a Jerezeskum exige un rublo más si el viaje es hasta el centro. Ni porfavor ni porfavá. Tanianexkum que no pago el rublo tuvo que bajar en Hipercoreskum. 
Como el sistema de blablacar permite los comentarios, blablabla, Artureskum que no quería que nuevos pasajeros pasaran tan mal trance, escribió una pequeña reseña que con educación venían a denunciar las malas artes de tan innoble conductor. Visto en riesgo su negocio, el mal sujeto no ha parado de acosar y amenazar a Ireneskum.
La vida es hermosa, las ideas de las personas son buenas. Pero siempre hay un aprovechado, aquí y en Moscú, que quiere sacar tajada.




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