lunes, 14 de octubre de 2013

CRÓNICA POLÍTICA DE JOSÉ SO NETO PEREIRA SOBRE EL ARRIBISMO Y EL MAL TREPAR, DE LOS QUE LLEGAN DICIENDO QUE TE DEFENDERÁN Y SE PONEN HASTA ARRIBA SIN DEFENSA Y CON DELANTERA CUANDO HAY PARIDAD.

Decimos en Portugal "te conozco bacalao, aunque vayas disfrazao". Y tal vez en Portugal nuestra saudade y pesimismo sea debido a que nada esperamos de los que rigen nuestros destinos. Sabemos que las cosas son como son, no como parecen ser. El poder es, desde tiempo inmemorial, un arte de profetas, patriarcas o jefes de la tribu que tenían más sabiduría que los demás. La corrupción no era moneda de cambio.
Hoy sí. Y en España más. En las comunidades de vecino preside el más gritón y menos preparado. Para delegado de clase se presenta el niño más cantamañanas. Para alcalde el que más bravuconadas promete aunque todos sepan que es mentira. Todo a lo grande, todo mentira.

Es frecuente el escándalo por apropiación indebida. Por quederte con lo que no es tuyo. Por recibir bajo cuerda regalos y donativos. Incluso Europa, tan dura con portugueses y griegos, mira hacia otro lado cuando entrega dádivas a España. Y de ello se aprovechan embaucadores y vendedores de humo, sindicalistas y banqueros. Todos en el mismo saco, todos juntos y revueltos. Revuelto de bacalao. Me engañas bacalao porque vas bien disfrazao. El sindicalista que habla de derechos y parece que defiende al trabajador, es un pobre hambriento que codicia el bienestar y los festines del rico. La maestra que todos los lunes faltaba e inventaba bajas es hoy consejera de educación de alguna autonomía que recordar no puedo pero donde vivió mi amado Saramago. Una señora de armas tomar. Así se escribe la historia. Personas justas y sabias que podrían gobernar, se niegan a entrar en la dinámica de trepas que incapaces de terminar la carrera de derecho encuentran en la política su única y ventajosa salida. Entre ellos se lo guisan y se lo comen. No compares que el bipartidismo no da buenas elecciones. 
SONETO DE JOSÉ SO NETO PEREIRA:
Es más fácil mandar que ser mandado
y los más sabios huyen de los cargos.
Por eso a veces, aunque le viene largo,
nos gobierna el menos capacitado.

El que nos representa en el sindicato
suele ser el que menos trabaja,
llega tarde, se escaquea, está de baja
y es como un chino en el zapato.

En política también es frecuente
que nos gobiernen los más caras
que con facilidad engañan a la gente.

Sus malas artes nos salen caras
y, aunque sabemos que timan y mienten,
todo es malo o peor cuando comparas.






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