EL ENTENDÍO Y ER CASIANO: CRÓNICA DE ENSAYO Y ERRÓ SOBRE ER GOBIERNO Y SUS MAMANDURRIAS.

ER CASIANO EN ESTADO DE CHOC (PENSILVANIA)

¡Vaya carita se le quedó ar Casiano cuando escuchó a la señora Aguirre que se acababan las mamandurrias! A sabé lo que pensó. Lo cierto es que estuvo tó er día preocupao.  Preocupao y reverde como siempre. La verdá que no es normá que la Sra. Aguirre diga estas cosas ná más que pá poletimizá. 
- Consejos vendo y pá mi no tengo. Esta tía siempre con la ley del embudo: pá ella lo ancho y pá nosotros lo agudo. Paella de engrudo le ponía yo.

Y es que pá cormo nos ha traío er Jesús dos fotocopias ca sacao de correos del interné donde viene Sor Fátima Yañez con los pisos que tiene y cobrando el plus de viví en Madrí de 1800 euros. Eso es inhumano. Y otro correo  indizzznante de verdá que va diciendo er suerdo de los cenadores y cosas que van a darle por si no tienen:
- Como mandaremos noticias por sms cada cenadó tendrá un portati que pa qué.
- Como los cenadores tienen que viajá no pagarán los billetes.
- Una tarjeta de 250 euros pá taxis por Madrí.
Amo a vé, señores. Seamos serios mejor que sirios. Ésto es desproporcionao. A ningún trabajadó se le dice:
- Y er Casiano, como tiene que labrá er campo le daremos un tractó.
- Y er Casiano, como vive en otro pueblo, le pagaremos er taxi.
Los trabajadores de este paí se buscan la vida pá llegá a trabajá y con las condiciones de trabajo.
-"IMPERCINDIBLE CARNÉ DE CONDUCÍ Y COCHE PROPIO"
Tal y como está er paí y er mundo lo de los políticos no tiene nombre. La cosa estaría en dar ejemplo aunque lo que se ahorre no sea mucho, pero el ejemplo es importante pá que er pueblo entienda er poblema. Te lo digo yo, que soy el Entendío. Y sobre tó tapenle la boca a esa tía que encima se permite er lujo de decirle a un pobrecito mío que está casi en estado de miseria que las mamandurrias se van a acabá. ¡Qué bruta hay que sé!  Y sobre tó como un riego personá o ruego colectivo, no se invente usté palabra que tenga coñotaciones que lo de la mamandurria es una auténtica PORBOCAACCIÓN, en tres palabras, que diría er Jesulín cuando comía cebolla en er portá de Belén.