- Hacía tiempo que no te veía. Qué mayor te veo. Estás cada día más viejo. El jodío se llama Noé pero no será el del arca. Que Noé trataba muy bien a los animales y mira lo que me ha dicho. Dos días llevo llorando. El tío va hecho un cristo con su melena y sus barbas viviendo de la caridad. No ha pegado un palo al agua y ni siquiera ha separado el agua ninguna vez. Y para colmo el crucificado con sus palabras fui yo.
Pero luego me dije: tú has leído a Quevedo desde que no tienes uso de razón y ya sabes que nacer es morir un poco. ¡Claro que estás cada día más viejo!. Acuérdate con un mes lo repantingao que estabas en la camita. Posiblemente te hubiera gustado quedarte ahí toda tu vida. Pero tenías que salir al mundo a pelearte con él....¡¡¡Pero que bruto, hijo!!! Te lo tomas todo al pie de la letra. Se ve que tú fuiste el primer indignado y no tenías ni diez años!!! ¡Qué violencia en esos ojos!
Menos mal que después los años te quitó un poco de furor. O no. A lo mejor hubiera sido preferible una bronca detrás de otra. No vale la pena ir con carita de niño bueno. Al final al bueno le llaman tonto. Pues si, te vas haciendo más viejo. Pero así es la vida. Y después diste un paso más y el trabajo no terminó contigo porque encima hacías lo que te gustaba. Pero sí. No cabe duda. Los años pasan, nos vamos haciendo viejo. No hay nada peor que el retrato. Bueno, sí, el retrato del que le vende su alma al diablo. Él no envejece pero el cuadro sí. Mejor así.Mejor un espejo y poder decir "me hago viejo".
Es mejor así. La vida es como un simpático comentario que me hacían en el blog: Lost ierto es que no menterou de lo que pasa en este blog. Y es que esto es Blogger, y aquí hay que mamar.
