CANTAUTORES. 4. CARLOS CANO

Carlos Cano. No sé si por ser andaluz. No sé si por beber los vientos de Cádiz. No sé si por su figura renacentista y su visión de la realidad andaluza. No sé por qué. Pero curiosamente se me hace todavía un nudo en la garganta cuando lo recuerdo o se me viene a la cabeza alguna canción, especialmente de "A duras penas"

He tenido muchas oportunidades de verlo en directo. En el año 75 o 76 en el colegio Ribera en un concierto para cuatro gatos. Allí sólo con su guitarra. Memorable. Después, según fue adquiriendo popularidad Sanlúcar, Jerez, Rota. Y una evolución constante pero sana. Mezclando lo más coloquial y lo más íntimo o cultural hasta desembocar al final en la copla.
También compré y conservo todos los discos de vinilo. Quizá sea "Crónicas Granadinas" el más completo pero todos tienen un buen nivel. Cuando hablaba con él le preguntaba por Gambino, Sarraute, pero casi era yo el que le daba novedades de ellos porque les había perdido la pista.
"A través del olvido" es para mí su disco más artístico porque las canciones se huelen y se tocan.
Carlos representa al andaluz de corazón, culto y universal. No el andalucismo feroz y nacionalista sino a ese andaluz que te identifica como persona.
Su humor le llevó a identificarse con el carnaval de Cai y con todos los autores que le escribieron hermosos textos cuando murió e incluso cuando su primer infarto. Carlos, ha sido un placer

CANTAUTORES. 3. LLUIS LLACH

Representa como nadie la sensibilidad. En aquellos tiempos de vinilo recuerdo mis veranos por Barcelona buscando por las tiendas de discos de San Pablo discos a buen precio de Lluis Llach. Primero me compré el Ara i aqui. Es un disco de mucha calidad. Curiosamente me gusta más que Gener 76. Todos los discos que están entre uno y otro son maravillosos. Comme un arbre nu pero especialmente I si cant tris son dos discos redondo que en vinilo suenan mejor aún. Oír las grabaciones de Movie Play y el cuidado de los técnicos en todas y cada una de las pistas es un regalo para los sentidos.
Lluis ha sido tremendamente coherente con su vida y sus recitales son preciosos porque une humildad e ironía. Lo vi en el Teatro Falla de Cádiz y en Barcelona en un campo de fútbol en una noche mágica con La Bullonera y muchos artistas reivindicando la música en vivo. También estaba Miguel Bosé que, en aquellos tiempos, fue abucheado.
La cara B de Viatje a Itaca o del Campanades son espléndidas. Tiene un talento musical innato y sus canciones también me persiguen en muchos momentos, especialmente los tristes. Pero eso me da fuerza

CANTAUTORES. 2. PACO IBÁÑEZ

Como otros muchos, a Paco Ibáñez le debo llevar una canción en los labios con sabor a Poesía. Muchos versos aprendí con su música y muchos poetas me interesaron por su enorme trabajo.
Yo no era más que un estudiante de 2º de BUP, allá por el año 76, y el disco Paco Ibáñez en el Olimpia me lo compré en navidad y lo llevaba como un tesoro debajo del brazo. Desde la Librería Alternativa hasta mi casa era el chico más grande del mundo. Eran dos vinilos y por tanto cuatro caras que escuchaba continuamente y de ahí mi amor por Lorca, Machado, Arcipreste o León Felipe. Recuerdo en clase de literatura como rehice Las propiedades que el dinero ha, sustituyéndolo por el estudio y la crítica dura a un sistema educativo poco práctico.
Vi a Paco Ibáñez en el año 2007 y cual no sería mi sorpresa al escucharle más de 30 canciones. Fue un gran recital en Dos Hermanas. Poco después, el 23 de abril, lo vi por Internet en el Palau y fue más sorprendente todavía. Lo había visto en el Puerto de Santa María por los años 80 y en la catedral de Jerez. Todo lo que se pueda escribir es poco.
La trayectoria posterior y su evolución en discos como "A flor de tiempo""Por una canción" o su interpretación de Neruda o Brassens son espléndidas pero aprenderse esas canciones tienen un valor añadido porque te acompañan en todo momento.
Gracias Paco por tu saber hacer y por tu coherencia.