ANA LÍTICA SINTE. LECCIONES MAGISTRALES Y REFLEXIONES DE UNA PROFESORA DE ESTADÍSTICA A LAS SIETE DE LA MAÑANA DE UN SIETE DE JULIO SOBRE LA VIDA Y LA BELLEZA

Todas las mañanas no te levantas igual. Hay mañanas que ves las cosas más claras. Hoy he probado a ponerme la manzanilla en el ojo y no solo veo más nítido sino que además no tengo esos gases que me atormentaban al incorporarme. Hoy es 7 de julio y aunque algunos bravucones se arriesgan delante de unos cuernos de un pobre animal para mi es el primer día del resto de mi vida. No me importa que sea siete o diez. Ayer me acosté contemplando el cielo de innumerables luces alumbrado y hoy me he levantado poética. En la universidad de Dijon donde estuve como alumna excelente me enseñaron a no vagar y a no divagar. Fue un aprendizaje duro que me ha durado hasta hoy. Pero hoy me siento rica porque entiendo que el saldo de mi cuenta bancaria no determina el valor de mi riqueza. La vida no tiene que ser una batalla continua y debo dejar que el dinero fluya. Todo debe fluir. La felicidad depende de leyes y principios naturales. Tan pronto tomamos la decisión de hacer algo aparecen los medios para llevarla a cabo. Voy a desayunar, y viene volando el tostador a mi mesa. Somos lo que creemos. Cuando cambias tus creencias más profundas acerca del mundo, tu vida cambia también. A mi me pasó con los reyes magos. Yo era feliz y ese día me cambió todo. Hay que levantarse con la intención de permanecer relajado y tranquilo. Que nada turbe tu paz. Incluso el destino te pondrá a pruebas mandándote situaciones que normalmente te pondrían casi violento. No hagas caso. Respira hondo. No intentes cambiar el mundo, cámbiate tú. Las soluciones externas no valen cuando el problema eres tú.
Entonces llegarás a la felicidad, porque la felicidad consiste en hacer lo que te gusta y en esforzaste porque así lo decidiste, no porque sea una obligación aunque te obligues un poco en ello. No sé si me entiendes. La verdad es que pienso en francés y pienso en verde y mis traducciones me traicionan.
En tus acciones encontrarás el vehículo que te relacionan con los demás. Si es un camión y no sabes conducirlo igual acabas con tus relaciones, pero es el precio que hay que pagar. Es hacer lo que te gusta, comer lo que te gusta. Y no es una receta fácil, es una receta interesante, que no es lo mismo pero es igual. También le podemos llamar así. Es un eufemismo del capricho.
Si no sabes lo que te gusta es que no hablas contigo mismo, no seas pasota. Háblate. No intentes complacer a los demás, complácete a ti mismo primero porque de lo contrario dejas de ser quien tú eres. Porque amar es permitir a las personas que formen parte de tu vida. No lo contrario. Amar no es entregarse. Amar es que vengan a ti, entren en ti, se vacíen en ti, ayyyyy, que sudores me están entrando... en mi también.
Las decisiones más importantes de nuestra vida la debemos  tomar cuando estamos hechos polvos y asqueados de todo. Aprendemos en la dificultad, cuando te abandona tu compañero decidimos odiar a la humanidad. Así debe ser. Si perdiste el rumbo de tu vida debes buscar y para buscar hay que ... que me he perdido.
Tenía una disertación sobre todos los temas de la vida, pero me he liado. Todo es tan profundo, las raíces son tan gruesas, los árboles son tan altos. Estoy confusa. Un ardor de estómago inusual me provoca nauseas. Me falta algo. ¡Ya está: la manzanilla!