ER CASIANO PENSANDO. |
Pó ar Casiano la gustao Extremadura porque ha encontrao sus orígenes. Recuerda er Casiano un pueblo donde entró a tomarse unas birras y que la gente echaba las cáscaras de pipas ar suelo. Pó ya está, aluego se barren. Pero ese hablar bizarro con los parroquianos, pedir un café y que te pongan bizcocho, esas calles adecentás, ese vivir tranquilo, ese ardeano que te sale sonriendo en mitá de una foto, esas zapatillas de estar en casa de las que ya no se ven, ese agua corriendo por los barrancos, esas calles por las que no pasa er tiempo, ese pagar las cosas por lo que cuestan y no por lo que valen, esa ausencia de grandes tiendas que nos está matando, esa piedra, ese pueblo, esas tabernas, esos parroquianos, esa cencille, esa naturalidá.... er Casiano estaba y está siado. En aquel pueblo había matanza e invitaban a tós, en aquel de allí comías un menú que estaba delicioso, en el otro la gente al pasar te decía buenos días. Estamos perdiendo las buenas costumbres y eso no está bien.
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