

Pó lo del rey iguá o mesejante. Se va pero no se va. Mete al hijo pero él sigue siendo el reu, como el mejicano. Con dinero o sin dinero hacen siempre lo que quieren. Se persupone, como dice er Jesú, que los que nos gobiernan tienen que sé un ejemplo vivo pá el pueblo vulgo. Pó no. Lo primero que piensan es en el aforramiento económico y el aferramiento pá que no le puedan echá la curpa de ná. No me echa a mi la curpa de lo que pase, cantaba el Alberto Jamón. Vaya ejemplo nos está dando los sobaos y mandalena, los ugetés y similares. El podé debería ser soplo daire puro, de trasparencia. Y ahora resurta que tenemos dos reyes y dos reinas, dos cuñaos que ni te cuento, dos hijas que parecían tontas pero que no lo son tanto,, dos nuevas infantas y un froilán que vale por dó. Todo lo vemos doble en un país que nos obligan a beber para anestesiarnos ante tanto cara dura. Aquí el que menos corre tumba ar dalante. Y eso es lo que pasa ni más ni menos.
Asoma las mejillas el lider de pokemon que tiene debilidá por un mercachifle parrandero y demagogo que iba por las comarcas de Venezuela vendiendo frascos falsos dagua bendita y nos descuadernamos. Y decimos en la peña, madrecita madrecita que me quede como estoy. Hasta Rubalcaba recibe el pendón de los pecados.

Sin mundial, sin Cataluña con tintos soberanistas, con un rey gran reserva y con tantas mentiras contadas y por contar, la esperanza no es lo úrtimo que se pierde, es la indecencia.
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