EL ENTENDÍO Y ER CASIANO: CRÓNICA DE ENSAYO Y ERRÓ DER CINE Y DE LO IMPOSIBLE, GLÚ, GLÚ, GLÚ

ER CASIANO ENSAYANDO CARAS PÁ PONER EN LA
PELÍCULA.

Hacía lo menos cuarenta años que no iba ar cine porque er viento se lo llevó y en er pueblo no teníamos pá comprá otra sábana gigante. Era de aquellas cintas que se enrollaban y duraba la película un viaje. Ma cuerdo de vé "Le llamaban Trenidá" y en er descanso sacaba un bocadillo de tortilla envuerto en papé de periódico. De la película no me acuerdo mucho.

Pó resurta que er Casiano me estaba dando la murga pá que un miércoles fuéramos a vé una película que te pasas tó er rato llorando porque está tó er mundo pasao por agua después de un Churami que hubo en oriente hace unos años y está basao en hechos reales y verdadero, que es lo que se dice cuando tó es mentira, improbable o imposible. Y como ademá pá los mayores de 60 hacen otro descuento pó me decidí y entré.

Lo primero que ha cambiao en los cines es que ahora er cine se ve con los cinco sentiós, sobre tó con el orfato. Ves que la gente entra con paquetones de palomitas y por curpa de la crisis otras cosas más baratas pero más apestosas. Tó el tiempo te da la impresión de está metió en una olla de palomita con mantequilla rancia. Y con el orfato el oído, que no el odio, pero parecío. La gente mastica y hacé chas, chas, chas. En estos tiempos de vacas flacas no podemos está sin rumiá. Tó la película se la pasaron los de delante, los dal lao y los datrá chas, chas, chas. 
Los cines se convierten en grandes comederos de ganao.
Pá cormo de male se llevan una cola loca grande y también hay que aguantá sonidos esquerosos y ascabrosos que retumban en la sala de forma subliminá. Porque ahora las salas tienen un enorme sonido y pá ambientá empieza a soná el elicóctero un rato antes, el viento media hora antes, la música un año ante. 
De los cinco sentíos con estos tres ya siento habé roto mi rutina y no haberme tomao un chato de vino. Pero ojo. La vista es la que trabaja, las imágenes estaban mú lográs. Ma dicho er Casiano que vio que tó era una maqueta y defectos especiales. Pero yo estaba impreionaito y arguna ve una gota de agua del Chunami me se metía por el ojo y tenía que sacármela, que no voy a reconocé yo que estaba llorando.
Con la esperanza que tó lo que te contao lo haya hecho con tacto, vete a vé la película si tienes ese gusto. No orvides llevarte las palomitas.