Mi prostración en cama por mis dolores desde el sábado de dolores es mú de lamentá. Pero como nuestra vida son dos días y como no hay mar que cien años dure tengo que sacar fuerzas de flaqueza y de donde las haiga y pasármelo lo mejón que pueda.Me trae mi señora a la cama unos platos que no se los sarta un gitano: sopa de marisco y brazuelo de cordero con patatas a lo pobre he comío hoy. Casi ná. Un poquillo de siesta y un ratico grande de tele. Por fin hoy ha salío telecinco como la cadena más vista. Ya era hora. Porque la gente es como la tele que ve. Y ya estaba bien
de un país de gente sosa que veía la tele gubennamental, que nos comían er coco como en la soviet suprema. Por fin la tele rosa se ha hecho con el lideralgo. Y yo es que me lo paso bien. Paece como una continuidad de la tertulia en er bar: tó er mundo hablando y allí no se entiende naide. De pronto pá que te escuchen tiras un vaso pó allí dices una palabrota o te bajas los pantalones o te haces el dormío. Qué forma tan divertida de hacer el ridículo pá que la gente se ría. Todo es espetec y espectaculo. Aunque penosos como mi primo siempre dicen que es una cadena bochornosa, bochorno es hablá de un programa sin verlo. El graciejo de la presentadora o del Jorjejavié, qué arte. A mí no me gustan los que son homófonos y por el hecho de sé de la otra acera que no quieran cruzá la calle.Cada pueblo tiene la televisión que se merece y España ya despierta de su siesta y cuando despierta se encuentra con la fiesta de una gran cadena donde sin pudó igual bailan aunque no sepan o cantan a grito. Es el puro espectaculo nacioná, es la diversión por Antón Nomasia.
Por fin vuelve la tele de las mamas chichos y volveremos a vé domingas en condiciones. Y al que no le guste que se fastidie.
La televisión es eso, el reflejo de la suciedad, pendón, de la sociedad. Y como los que reniegan como mi primo de su existencia es porque son ellos los que no existen.
Gracias Sálvame por salvarme las tardes.
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