Queridos hermanos argentinos.
Crecí leyendo a Cortázar. Yo fui uno de los que se quedó con la imagen grabada en la frente del absurdo de pasar por la ventana.
Aunque no os lo creáis tengo discos de Quinteto Tiempo y los escuchaba con cierta asiduidad.
Me sé de memoria los cuatro primeros discos de Les Luthiers. ¿Cómo estás Porfidio? ¿Qué hubo Bernardo? La serenata mariachi, la yegua nuestra. ¡Cómo me divertían!
Claudina y Alberto Gambino y Nacha Guevara eran de mis cantantes preferidos. Recuerdo a Rafael Amor casi todos los días porque no rezo el Ave María, recito el Loco de la Vía.
Tenéis un humor único. Vosotros mismos os metéis con vosotros mismos y decís aquellos de que seriáis ricos si comprarais a un argentino por lo que vale y vendierais por lo que dice que vale.
Sos geniales.
Mi hija se sabe todas las canciones de Ariel Rot. Facundo Cabral lo tengo sobre la cabecera de mi cama
No sé que más deciros.
Bueno sí. Que jamás debimos quitaros tanta plata. Que estamos muy avergonzados.
Pero hombre, ahora que estábamos ayudándoos a sacar petróleo pá traérnoslo pá España, quitarnos YPF es una contradicción. Os hemos dejaos a Messi en la selección.
Lo de ganaros la copa David de tenis fue pura casualidad, un par de partidos buenos y poco más. Pero la próxima vais a ganar seguro.
Vamos, dejarnos YPF que esto está a punto de estallar...
Bueno... bien pensado, cuanto menos petróleo menor explosión.
Quedaros con YPF.
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